Cuando decidimos deshacernos de nuestro ordenador, de un disco duro o bien, cuando prestamos a alguien nuestro pendrive, debemos tener en cuenta los datos que han contenido anteriormente.
Casi todos comprobamos que en el disco duro del PC, sobre todo en la carpeta donde guardamos nuestros archivos no queden archivos personales, puesto que la gran mayoría en un momento u otro hemos guardado información privada, aunque haya sido de forma temporal, que aunque hayamos borrado, con el uso de determinados programas de recuperación de datos, fáciles de usar y de conseguir, se puede recuperar.
Y es que, cuando borramos o incluso cuando formateamos nuestro disco duro o pendrive, los datos no se borran totalmente, tan sólo dejan de estar visibles y accesibles al usuario, el sistema los marca como libres para su reescritura posterior y esto es aplicable a cualquier partición del disco, aunque no sea la que contiene el sistema operativo.
Ello es así porque los discos duros utilizan una tabla en la que se hace referencia a la ubicación física del disco en la que se encuentra dicho archivo, algo así como un índice.
Al formatear lo único que se hace es borrar ese índice sin tocar los datos, así cuando instalamos un sistema operativo y no encuentra ese índice (tabla de asignación de archivos) interpreta que el disco duro está vacío y reescribe sobre ellos.
En cierta ocasión mi hermana me pidió ayuda porque había borrado por error un archivo que le era necesario, aclaro que ese ordenador se lo había pasado yo al comprarme uno nuevo y lógicamente, no sólo había borrado todos mis archivos, también había formateado el disco duro antes de reinstalarle todo el sistema para entregárselo “a estrenar”.
Me puse manos a la obra para intentar recuperar ese archivo borrado por error utilizando un programa muy sencillo y cuando el programa nos mostró los archivos que podían ser recuperables, observamos como, en la lista de archivos a recuperar se podían ver multitud de archivos míos, pese a que, como digo, se había formateado el disco duro anteriormente.
Si en vez de ser a mi hermana a quien le pasé ese ordenador, lo hubiera vendido a cualquier persona, o lo hubiera desechado en cualquier punto limpio, alguien, sin que hiciera falta que tuviera mucha preparación para ello, podía haber recuperado esos datos, y como poco, mi privacidad hubiera quedado comprometida. Y al decir privacidad me refiero a claves de correos, a cuentas bancarias, a informes médicos, etc.
Como ya he dicho existen muchos programas para poder recuperar archivos borrados o perdidos de nuestro PC, incluso después de formateado el disco duro, y todo ello de forma sencilla, y entonces nos preguntamos:
- ¿Qué hacemos si queremos deshacernos de nuestro PC, nuestro disco duro o queremos prestar el pendrive?
Pues lo que debemos hacer es utilizar algun programa de borrado seguro, que lo que va a hacer es sobrescribir varias veces el contenido de todo el disco duro o pendrive con una combinación de valores preestablecidos (pueden ser todo ceros, o todo unos, incluso valores aleatorios), haciendo muy difícil su recuperación (me resisto a decir imposible recuperación, puesto que imposible no hay nada) con programas normales.
Aquí os pongo los enlaces a los manuales de algunos de estos programas que nosotros hemos probado y explicado en nuestro otro blog Cajon desastres:
De Interés:
- Tengo antivirus y me he infectado.
- Poner nombre a una Llave USB o Pen drive.
- Antes de manipular el equipo, informate. Consejo.
- Actualizar Windows Live Messenger.
- No puedo instalar la impresora.
- Nuevos Manuales de Windows 7.
Software de recuperación de datos para Windows. Prueba gratis.
www.HandyRecovery.es